Falafel

Falafel. Esto es mágico.

Crujiente por fuera y ligero, casi grumoso, por dentro, con sabor parecido al de las nueces. Aquí cuanto más ajo, hierbas, y el picante, mejor!

No recordamos cuando nuestro amor por falafel empezó pero el camino para encontrar una receta para el falafel perfecto ha sido muy largo. El verdadero falafel TIENE QUE ser frito, no horneado. La fritura le aporta una textura superior, le da una capa crujiente por fuera y la jugosidad necesaria por dentro – algo que no podrás conseguir horneándolo.

La versión egipcia utiliza habas secas mientras que en otras áreas se utilizan mitad de habas mitad de garbanzos. O incluso algunos utilizan solamente los garbanzos como los palestinos. Nuestra versión favorita es la de habas. Nos parece más fresca y sabrosa.

Es muy importante poner en remojo las habas (o garbanzos) durante 24 horas. (El agua debe ser fría). Normalmente agregamos 1 cucharada de bicarbonato sódico al agua para reblandecer las habas.

Tradicionalmente el falafel se sirve con pan pita, hierbas frescas y una salsa tahini. Esta es nuestra manera favorita de comerlo, con algunos encurtidos caseros, berenjena frita y un huevo pasado por agua.

Este falafel es mucho mejor al cualquier versión que puedes comprar – con muchas hierbas, ligeramente picante, con un sabor a ajo y muy tierno dentro.

Ingredientes

• 500 g de habas sin piel
• Un manojo grande de cilantro o perejil o una mezcla de los dos, picado
• 7 cebolletas picadas
• sal kosher
• ¼ cucharada de cayena (o chilli)
• 2 cucharadas de comino molido
• 2 cucharadas de semillas de cilantro
• 6 dientes de ajo machacados
• 1 cucharada de levadura en polvo
• aceite de girasol para freir

Preparación

1. Pon en remojo las habas durante 24 horas. Escurrelas y sécalas bien con un papel de cocina.
2. Tritura las habas hasta obtener una masa homogénea y suave. Cuanto más tiempo trituras, mejor.
3. Agrega la sal, cayena, comino, semillas de cilantro, ajo y levadura en polvo. Continua triturando todo hasta que se junten bien los ingredientes.
4. Añade el perejil picado, cilantro y cebollino y tritura poco tiempo. Deja reposar la masa durante 1 hora.
5. Calienta 2,5 cm de aceite en fuego medio/alto.
6. Forma los falafels del tamaño de una nuez (aproximadamente 4 cm en diámetro) y fríe unos cuantos al mismo tiempo en aceite profundo. Es más fácil si preparas los falafels en un plato y los mueves a la sartén con ayuda de una espátula (son muy blandos). El aceite debe ser suficientemente caliente para que los falafels chisporroteen. Después de un minuto disminuye el fuego.
7. Cuando estén dorados en ambos lados, sácalos con ayuda de la espátula. Ponlos en papel de cocina para quitar el exceso de aceite.

Sirve los falafels con pan pita casero caliente y una ensalada israelí.

Notas

• Antes de freir espolvorea las semillas de sésamo en un plato y reboza el falafel crudo
• Puedes utilizar los garbanzos en vez de habas para la versión Israelí más habitual
• El reposo de la masa cruda de falafel te ayudará a bolear los falafels con más facilidad
• Esta receta también te servirá para hacer la versión horneada: Coloca los falafells en una bandeja con papel sulfurizado y hornealos unos 15 / 20 minutos a 180C / 350F”, dándoles la vuelta después de 10 minutos.